Regalos por ser un cliente fiel

Siempre pensé que lo de los clubes de puntos de las marcas comerciales era un engaño. Sobre todo por la experiencia que tuve cuando quise conseguir regalos con una empresa de tabaco y otra de alimentación. En ninguno de los dos conseguí mi objetivo.

En el primero de ellos, porque debía fumar 100 cigarrillos al día (o robar un estanco) para conseguir el premio. No calculé bien. Si habéis mirado alguna vez el folleto de una de estas marcas de tabaco, siempre suele aparecer un súper premio que es el descapotable rojo tipo Mustang. Obviamente, es imposible de conseguir. Ni lo intentes. Pero yo solo quería un mechero Zippo, edición limitada. Tampoco. Por suerte para mi, dejé de fumar y me olvidé de Mustangs y mecheros.

Hace unos años pensé: ¿cuál es la marca que más consumo? Central Lechera Asturiana. Si es la marca de la que más productos consumo tal vez sí pueda beneficiarme y obtener algún regalo. Y así es como me hice socio del club asturiana confiando en tener más suerte que la última vez que opté a un premio en el club de una empresa de alimentación de la que no recordaré su nombre para no hacer publicidad…

Recuerdo que mi familia y yo coleccionamos códigos de barra de los envases de un producto para conseguir no se qué premio. Ni recuerdo el premio, pero es posible que fuese algo sin demasiado valor, tipo unas sartenes o algo así. Lo que sí recuerdo bien es que una vez que terminamos de coleccionar, mandamos una carta y un tiempo después recibimos una contestación en la que se nos negaba el premio: al parecer alguno de los códigos de barra no estaba en condiciones óptimas. Todavía hoy sigo sin comprar productos de esa empresa. Veto de por vida.

Por suerte, conocí el club asturiana de la Central Lechera. Y con él, no he tenido ninguna mala experiencia.  El último regalo al que estoy optando es una bicicleta personalizable de piñón fijo, de esas que están ahora de moda.  Y la pienso conseguir, ya sabe la Central Lechera a lo que se arriesga si no la consigo…

Temporada de rehabilitación de casas

La primavera marca el pistoletazo de salida para las reformas de viviendas. El buen tiempo ayuda a que los trabajos se hagan sin interrupciones, aunque las olas de calor no son muy bienvenidas por los trabajadores… Además, este final de primavera e inicio del verano están demostrando que el sector vive un considerable repunte: cada vez se reforma más y se invierte más dinero en la misma.

La crisis económica que se inició a finales de la pasada década fue decisiva para el sector inmobiliario, eso es algo que, a estas alturas, está más que comentado. Pero la crisis también afectó a las reformas hogar de diferentes modos. Por un lado, muchas personas que tenían previsto cambiar de casa, se lo pensaron mejor, y decidieron permanecer en su vivienda antigua.

El problema de esta vivienda antigua, en numerosos casos, es que precisaban de forma urgente reformas y rehabilitaciones. Las viviendas de finales de los 70 y años 80, con entre 30 y 40 años de antigüedad son las que se asomaron a este ‘dilema’: reformar o reformar. Tanto los propietarios que deseaban vender sus pisos como los que pretendían seguir viviendo en ellos tuvieron que pedir presupuesto. En algunos casos, las propias directrices legales obligaban a reformar edificios con lo que también se ofrecieron subvenciones para reformas hogar.

Lo tiempos han cambiado desde la crisis económica. Lo peor de la misma ya ha quedado atrás y el ánimo de los propietarios es otro. Muchas de las reformas que se proyectaron durante el año pasado, según diversas estadísticas, fueron más por ‘capricho’ que por obligación. Se trata de un tipo de reforma a pequeña escala que tiene por objetivo actualizar determinadas zonas del hogar. Son, tal vez, esas reformas que quedaron aplazadas en el pasado y que ahora, con una posición un poco más desahogada, se pueden abordar.

Y la tendencia para este año sigue imparable. El hecho de que se compre más vivienda nueva también supone más posibilidades de reformas, puesto que los nuevos propietarios cambian cosas para adaptarse a sus gustos. No hay duda, es temporada alta de reformas.

Errores a evitar en una mudanza

Tener que mudarse es una de las cosas más engorrosas que existen. Aunque te vayas a una casa mejor o el cambio se produzca por una buena razón, como un nuevo trabajo, la mudanza no deja de ser un proceso pesado y estresante. Por ello, es importante tomárselo con cierta filosofía y trazar un plan que pasa también por evitar algunos errores. No vaya a ser que luego tengas que acudir a tiendas de hogar a reponer todo lo perdido en la mudanza…

No revisar bien el contrato que firmamos con la empresa de mudanzas (eso, si es que firmamos un contrato). Apalabrar las cosas solo sirve si luego todo sale como estaba previsto. Pero si, por ejemplo, un mueble sufre un desperfecto durante el proceso de mudanza, ¿quién se hace responsable? Aclara todas tus dudas antes de comprometerte con una empresa de mudanza.

No hacer un inventario de la mudanza. Si tenemos muchas cosas que transportar, lo adecuado es llevar un inventario de todas nuestras pertenencias: caja 1 (libros), caja 2 (revistas), caja 3 (zapatos), etc. De esta forma, cuando lleguemos a la nueva casa y esté todo descargado, podremos tachar todas las cajas y bultos de la lista y quedarnos tranquilos con que no hay ninguna caja que haya ido a parar al agujero negro de las mudanzas.

No tener especial cuidado con los muebles. Te recorriste decenas de tiendas de hogar para encontrar ese sofá que se adaptara perfectamente a tus necesidades. Si quieres que llegue en perfecto estado a tu nueva casa y el transporte lo haces tú, usa el sentido común y protege al máximo tus pertenencias más importantes.

Cajas demasiado grandes. Es un fallo muy común. Se tiende a pensar que cuanto más grande sea la caja, más podremos guardar y menos tendremos que transportar. Las cajas grandes llenas de cosas pesadas son un engorro que no hay nadie que levante luego.

No vaciar los cajones. Con las prisas muchos creen que es mejor llevar los cajones tal cual. Durante el transporte los objetos se pueden mover y caer. Cuidado.

El síndrome de Diógenes. La mudanza es un buen momento para deshacerte de todas esas cosas que sabes que sobran pero que no encuentras el momento para tirarlas.

Un mes mirando zapatillas

No me gusta comprar cosas, me aburre. No soy muy permeable a esa satisfacción en la que se apoya nuestra sociedad consumista, ese efecto agradable pero fugaz de comprar algo que nos gusta. Soy un bicho raro, lo sé. Me gusta tener cosas que me gustan, valga la redundancia, pero cada vez siento menos satisfacción por lo nuevo y, por el contrario, cada vez me atrae más comprobar cómo pasa el tiempo por los objetos.

Lo voy a explicar de forma sencilla: me pueden gustar más mis zapatillas viejas que cualquiera nueva. Prefiero salir a la calle con algunas de mis zapatillas deportivas de cordon trenzado con varios años de antigüedad que con unas nuevos y relucientes. Mi madre me ha dicho alguna vez que parezco un pordiosero, pero “cada uno hace va como quiere, mientras no infrinja ninguna ley”, le digo yo.

Me gusta la ropa con historia, por decirlo así, pero también es evidente que hay que cambiar de vez en cuando, sobre todo si la ropa se rompe… Así es que ha llegado el momento de añadir unas zapatillas a mi colección.

No me gusta comprar, pero si he de hacerlo, me lo tomo con suma calma. La suerte de hoy en día es que no tengo que ir a decenas de tiendas como hace años, cosa que me gusta menos que comprar… Por internet puedes hacerte una idea de lo que hay en el mercado y luego ir a una tienda ‘a tiro fijo’, o comprarlo directamente por internet.

Sabía exactamente lo que buscaba en este caso: unas zapatillas de tela o lona con cordon trenzado, frescas y liviana para el verano. Mi intención era apostar por alguna marca poco conocida, algo diferente que las tres o cuatro marcas conocidas por todos.

Tras las primeras batidas, me decepcioné un poco: la mayoría de zapatillas no eran demasiado originales. Había lo de siempre. Pero al final descubrí unas con decoración de camuflaje, pero muy sutil, nada escandaloso. Me pareció interesante y me las llevé. La próxima vez que vaya a casa de mi madre las llevaré puestas, limpias y nuevecitas, para que no me confunda con un mendigo y me corra a escobazos…

Un coche barato y seguro

Si estás buscando un coche a buen precio pero que te garantice seguridad en la carretera puedes optar con un vehículo de segunda mano de una marca que te ofrezca todas las garantías. Un citroen de segunda mano puede ser una excelente opción ya que estos vehículos tienen una excelente relación calidad/precio. Hablamos de una marca conocida, con un sólido prestigio y con muchos modelos que están más que comprobados en lo que se refiere a su calidad y a su buen resultado.

Esta marca dispone de vehículos para todas las necesidades, desde aquellos de pequeño tamaño pensados para la ciudad, como el C2 o el C3 hasta gamas medias mucho más versátiles que también valen para largos viajes, como el C4. En el mercado se pueden encontrar también modelos que aunque ya no se fabrican, como el Xsara Pisasso, todavía es posible encontrar en buen estado siendo una buena elección para aquellos que tienen niños pequeños.

Se trata de conseguir un coche que encaje perfectamente en nuestras necesidades y por eso, antes de ir a comprarlo, hay que tener claro para qué lo queremos. Si se trata de un segundo vehículo en casa cuyo uso va a ser para ir a trabajar y para pequeños desplazamientos ¿por qué comprar un motor demasiado potente que acabará consumiendo demasiado? Una opción más económica, con un consumo bajo y con menos caballos es mucho más inteligente aunque nos resulte menos atractiva.

Sin embargo, en el vehículo principal que se puede utilizar para algunos viajes y en el que normalmente puede viajar toda la familia e incluso llevar carga, no hay que regatear en este aspecto. Debe de ser un coche con buen motor y una potencia adecuada para no quedarse cortos.

Mucha gente asocia los caballos de un coche con la velocidad. Piensan que si se escoge uno con muchos caballos es porque se quiere correr en la carretera. Pero muchas personas lo que buscan es la potencia para mover un coche demasiado pesado, arranque en los cruces o, simplemente, que el vehículo se mueva bien tanto cuando solo va el conductor como si va a tope de pasajeros y equipaje.

Decide cuál es el tipo de coche que necesitas, qué presupuesto estás dispuesto a gastar en tu nuevo vehículo y acude a un taller de compra/venta de vehículos de confianza para buscar un modelo que encaje bien contigo.

Tus clientes confían en tu palabra

Cuando haces negocios con tus clientes ellos confían en tu palabra, tanto en la que les das directamente como en la que va implícita en los contratos. Esto quiere decir que, por un lado, ellos confían en que tú les vas a proporcionar el trabajo para el que te has comprometido en un plazo de tiempo razonable o dentro del límite que les has marcado.

Por otro lado, ellos también confían en que tú cumples con la ley vigente que va implícita en un contrato, como es la Ley de Protección de Datos y que toda la información que te proporcionan está segura y a salvo de robos o de malos usos.

Por eso, sabes que necesitas contratar Servicios mantenimiento informatica el Prat para tu empresa. Por un lado, ellos se asegurarán de que los equipos funcionen como es debido, que estén siempre en buenas condiciones y que si surge un problema este pueda arreglarse rápidamente.

De este modo, podrás cumplir los plazos en los proyectos que te hayan sido encomendados y no tendrás que pedir ampliaciones debido al mal funcionamiento de los equipos o a la pérdida de trabajos que ya habían sido realizados.

Esta empresa de mantenimiento se encargará también de garantizar la seguridad de la empresa. Esto puede hacerlo mediante la instalación de antivirus seguros y también mediante la revisión periódica de los equipos para comprobar que no hay nada malo en ellos que puede poner en riesgo la seguridad y comprometer la información.

Por desgracia, las bases de datos están muy cotizadas, especialmente si hay datos tan importantes como números de tarjetas de crédito o de cuentas bancarias. Que nos roben todos esos datos afecta a la seguridad de nuestros clientes y puede tener responsabilidades para nosotros si no hemos cumplido con las medidas a las que nos obliga la ley.

Este tipo de servicios de mantenimiento pueden pagarse mediante tarifa plana. Se escoge qué tipo de servicios necesita exactamente nuestra empresa y se acuerda una cantidad fija mensual independientemente del volumen de trabajo que haya. De este modo, es mucho más fácil cuadrar cuentas para la empresa.

Paga una cantidad fija y se olvida de las abultadas facturas que puede recibir cada vez que haya un problema y que pueden descuadrar fácilmente la caja de un mes en una empresa en la que no hay un gran volumen de ingresos.

Negocios y problemas de vandalismo

En algunas zonas de marcha de vez en cuando se sufren problemas de vandalismo en los locales comerciales. Por suerte, no es algo frecuente, al menos no en la mayoría de las ciudades. Pero cuando toca es todo un problema. Una de las gamberradas más frecuentes es la de inutilizar una cerradura poniendo pegamento o cualquier objeto que impida introducir la llave en el interior.

No necesitan ningún motivo para hacerlo ni tener ninguna enemistad con el dueño del establecimiento. Simplemente, eligen al azar cualquier local por lo que nadie está libre de que pueda sucederle. Desde luego, esto no es en absoluto una broma, es vandalismo puro y duro porque el dueño del establecimiento se encontrará con que no puede abrir su negocio, con los problemas que esto pueda acarrearle.

En este caso, debe de ponerse en contacto con Cerrajeros en San Sebastian baratos que puedan solucionar su problema con rapidez. Al menos podrán abrir su negocio lo antes posible y a lo largo de la mañana cambiar la cerradura esperando que el problema no vuelva a suceder. Es conveniente realizar también la correspondiente denuncia.

Un destrozo todavía más grave es el que tiene que ver con las lunas del escaparate. En muchos casos el cristal tan solo raja sin llegar a caer. Es lo más habitual ya que se trata de cristales muy gruesos y resistentes. Pero, en algunos casos, pueden venirse abajo o estar a punto de hacerlo suponiendo un peligro para la gente que circula por la acera.

Aquí, antes de nada, hay que llamar a la policía para denunciar los hechos y que levanten un parte de lo sucedido. Con esto, se puede llamar al seguro para que actúen tan rápido como la situación exija. Un escaparate con el cristal estallado no solo es peligroso, también es antiestético y va a hacer que muchas personas no se paren a mirar y, consecuentemente, se pierdan ventas.

Por último, entre los actos de vandalismo más frecuentes también podemos destacar las pintadas. Las pintadas con spray pueden hacerse en la fachada o en los cristales. En cualquier caso, son muy malas de limpiar y resulta bastante caro hacerlo. No todos los seguros incluyen la limpieza de fachada y cristales en este tipo de casos.

Denunciar es importante ya que muchos de estos grafiteros son reincidentes y conocidos por la policía. A continuación, se puede recurrir a una empresa de limpieza especializada.

NO TODAS LAS VENTANAS SON IGUALES

Un día fuimos a ver un piso para que lo alquilase uno de mis amigos y quería una segunda opinión, de modo que fuimos unos cuantos para ver si donde había escogido era un buen sitio o si por lo contrario se había equivocado y quería saber si nosotros podíamos ver algún fallo en el piso que a él se le había pasado por alto.

 

El piso en sí no estaba tan mal, era un poco viejo y las ventanas tenían unas formas un tanto extrañas, no eran como son hoy en día que todas son iguales o muy parecidas, cuando las vimos le dijimos que para esa clase de ventanas no le iba a ser sencillo encontrar unos estores que les fuesen bien, pero al final encontró una tienda online de estores a medida donde pudo encontrar unos estores que encajaban perfectamente en esa ventanas tan extrañas.

 

Hay pisos para alquilar por ahí que dan verdadero miedo, cuando alguien ponga un piso a alquilar por lo menos hay que adecentarlo un poco antes de enseñárselo a nadie o que menos que limpiarlo, pero como los que los alquilan solo buscan el dinero que van a cobrar por el alquiler no les importa como esté el piso, supongo que pensarán que ya lo limpiará el inquilino que alquile el piso, además hay veces que para que te vengan a arreglar algo que no funciona en el piso alquilado pueden pasar días e incluso semanas, viendo la dejadez con la que los propietarios tratan a sus inquilinos te dan ganas de quedarte en casa de tus padres para siempre ya que ellos por lo menos siempre responden cuando los necesitas.
Para mudarse a un piso alquilado sobre todo cuando es un piso antiguo hay que fijarse bien en todo y que todo funcione correctamente para no llevarse después sorpresas desagradables, así después no tendrás que llamar al propietario para que te venga a arreglar algo y tarde lo que le dé la gana. Si puedes y tienes la oportunidad múdate a un piso nuevo qu no tiene tantas complicaciones como uno antiguo.

Cómo limpiar las ventanas y cristales cuando tenemos persianas venecianas

Cuando tenemos persianas venecianas de madera debemos tener un correcto mantenimiento y limpieza tanto de la persiana como de los cristales de las ventanas. Así que una vez que nuestros marcos de las ventanas persianas venecianas de madera y nuestras persianas están totalmente limpias, podemos pasar a la limpieza de los cristales. Para ello necesitaremos contar con los productos y materiales adecuados. Estos productos que pueden utilizarse son mayoritariamente tres:

  • Amoniaco: Este producto tiene un efecto desengrasante ideal para poder limpiar nuestros cristales. Eso sí, hay que tener en cuenta que, al ser un producto abrasivo, es necesario rebajarlo con agua y utilizar guantes cada vez que vayamos a emplearlo como producto de limpieza. Gracias al amoníaco podremos acabar con la grasa de los cristales en algunas zonas de nuestra casa como la cocina.

 

  • Vinagre: gracias al vinagre podremos dar un mayor brillo a nuestros cristales mientras los limpiamos. Pero no vale con utilizar vinagre puro, sino que al igual que ocurría con el amoniaco, es necesario diluirlo en agua, en este caso tibia, y mezclarlo también con un poco de limón o de lima para disimular el fuerte olor. Luego podemos verter la mezcla en un pulverizador para poder utilizarlo con mayor facilidad.

 

  • Almidón: este es otro de los productos por excelencia para poder limpiar los cristales y las persianas venecianas de madera, y como ocurría en los casos anteriores, es necesario rebajarlo con agua. En este caso, por cada medio litro de agua podemos añadir media cucharada pequeña de almidón y luego utilizar una esponja con esta mezcla para limpiar el cristal en cuestión. Para retirar el almidón podemos utilizar un papel impregnado con vinagre. Debemos tener en cuenta que, si utilizamos almidón, no podremos limpiar los cristales en pleno sol ya que esto hará que el almidón se seque y sea muy complicado de retirar.

No cabe duda que limpiar los cristales no resulta una tarea demasiado sencilla, especialmente cuando éstos están muy sucios debido a la grasa de la cocina o el polvo del exterior

Aprovecha tu piscina todo el año

 

Las cubiertas para piscina permiten contar con una piscina en casa durante todo el año. Incluso si es una vivienda de vacaciones es algo que se va a agradecer y a lo que se quitará mucho partido. Una piscina cubierta puede climatizarse y, por tanto, disfrutarse cuando se acuda a la vivienda los fines de semana o puentes durante el invierno.

¿Te imaginas algo más relajante que darte un baño en un agua a la temperatura de tu cuerpo mientras puedes ver como en el exterior llueve o incluso nieva? Eso sí que es una experiencia de desconexión y desestrés que seguramente haga que quieras disfrutar de tu segunda vivienda con bastante más frecuencia, haciendo que tenga más uso y más disfrute.

Si para los adultos una piscina cubierta y climatizada es toda una tentación para los niños puede ser una verdadera fiesta. Quizás a los niños no les gusta acudir el fin de semana a la casa de vacaciones porque supone tener que pasar unos días fuera de su ambiente y alejados de sus amigos. Pero si saben que les espera una piscina en la que podrán estar disfrutando como si fuera el verano seguro que las cosas cambian.

Normalmente, una piscina supone una importante inversión en una vivienda, pero precisamente por eso vale la pena hacer un esfuerzo más y poder disfrutarla en muchas más ocasiones que el mes de vacaciones que se pasa en la casa. Un aliciente que hará que la segunda vivienda sea totalmente irresistible para toda la familia.

Y si esto vale para la segunda vivienda cuando la piscina está en la vivienda principal sobran las argumentaciones. Tener una piscina para todo el año es un gran lujo que está a tu alcance. Un dinero bien invertido que se amortizará rápidamente con los buenos momentos que se pasen en el agua. Por no hablar de que la natación es una fantástica manera de hacer un ejercicio muy completo sin tener que ir a un gimnasio.

Una advertencia importante, a no ser que seáis grandes amantes de la vida social y no os importe que cada fin de semana los amigos fijen vuestra vivienda como punto de encuentro, mejor no comentéis demasiado todas las ventajas de vuestra piscina cubierta ni la maravilla del agua a 38 grados en el frío invierno. La tentación es demasiado grande para poder resistirse.