¿De qué mecanismos se compone una persiana?

Desde su creación en el siglo XVIII por el físico Edward Bevan, las persianas se han convertido en un artículo habitual en millones de hogares y oficinas. Su capacidad para proteger contra la acción de los rayos solares, incrementar la intimidad y aislar de la contaminación acústica las han posicionado en aliadas del bienestar en interiores.

 

Pero las persianas también son productos susceptibles de sufrir más averías y roturas que una cortina convencional, debido al mayor número de piezas móviles que integran aquellas. Comprar Mecanismos para persianas es, por tanto, una necesidad cuando se producen atascos, fricciones o deterioros irreparables en la polea, el eje, el recogedor u otros elementos funcionales.

 

Pero ¿qué piezas y mecanismos componen una persiana? Dos de los más relevantes para su funcionamiento son la cinta y la guía cinta, responsables de subir y bajar la persiana con ayuda del recogedor. Son elementos visibles, por ubicarse fuera del cajón, y pueden deteriorarse con el tiempo y el uso regular.

 

Otra de las piezas clave es la polea, habitualmente de PVC o metal, que recoge la cinta en el momento de subir o bajar la persiana. Las conteras, por su parte, se ubica en los extremos del eje y facilitan su contención. A su vez, el eje se define como un cilindro metálico, responsable de enrollar las lamas de la persiana. Respecto a los tirantes, estos elementos facilitan la fijación de la primera lama al mencionado cilindro de la persiana.

 

El recogedor quizá sea el elemento más complejo, pues contiene el mecanismo responsable de enrollar y desenrollar la cinta, además de permitir su fijación donde el usuario lo desee gracias a la presencia de un muelle interior. En su lugar, los modelos de persiana más sofisticados incorporan un motor diminuto que, unido a otros dispositivos, posibilita su enrollado y desenrollado a distancia.

Breve historia de la mosquitera, un aliado contra los insectos

Con la llegada del verano, la venta de mosquiteras baratas vuelve a repuntar con especial intensidad en países cálidos como España. La Real Academia de la Lengua (RAE) define este objeto de dos formas: bien como un «pabellón de cama hecho de gasa, para impedir que entren los mosquitos», bien como un «bastidor de tela metálica que se coloca en puertas y ventanas para impedir el paso a los insectos».

 

Lo cierto es que, bastidor o pabellón, este accesorio es el ‘terror’ de las moscas, los mosquitos y cualquier insecto malintencionado. Estos invitados indeseados ya constituían un problema para civilizaciones tan remotas como la mesopotámica, la egipcia o la griega.

 

La historia de las mosquiteras es difícil de rastrear, pues, aunque el uso del término comienza hacia el siglo XVIII, se conservan registros de objetos similares utilizados en la India durante la baja edad media. Así, el poeta hindú Talla Paka Annamacharya las menciona como ‘domateras’.

 

Se estima que los antiguos egipcios fueron los primeros en adaptar toldos y cortinas para proporcionar una óptima iluminación, manteniendo a raya a los insectos. A los historiadores de hoy les consta que la última gobernante de la dinastía ptolemaica, Cleopatra, utilizaba una mosquitera en sus aposentos, lo que dibuja una imagen poco halagüeña de las plagas que debían molestar a los primitivos habitantes del Nilo.

 

La Antigua Grecia también disponía de un utensilio parecido para librarse de las plagas de insectos voladores. Que la palabra ‘mosquitera’ provenga de ‘mosquito’ se lo debemos a los griegos, quienes conocían este insecto por el nombre de ‘konops’ y denominaban al objeto destinado a impedir su avance como ‘konopéion’, voz que los romanos latinizaron ‘conopeum’.

A las mosquiteras debemos la existencia del Canal de Suez, cuyas aguas entre los mares Mediterráneo y Rojo estaban infestadas de mosquitos transmisores de malaria. Para su construcción, entre 1859 y 1869, el uso de mosquiteras disminuyó la mortalidad de los obreros involucrados. En la actualidad, este producto recibe un uso similar en países golpeados por el principal transmisor de malaria, el Anopheles gambiae.

Pros y contras de las persianas de aluminio

En el mercado encontramos diferentes opciones para la fabricación de persianas. Son muchos los materiales que se ofrecen y no todos responden por igual. El aluminio es uno de los más populares y en los últimos tiempos de los más solicitados. Pero ¿son todo ventajas en este tipo de persianas? Vamos a analizar los pros y también sus contras.

Las persianas de aluminio tienen a su favor la durabilidad. No se deterioran fácilmente y aguantan muchos años en perfecto estado con tan solo tener el cuidado de limpiarlas. Aguantan incluso la humedad y no son incompatibles con el sol. Tanto es así que incluso pueden estar por la parte exterior de la ventana y se mantendrán igualmente en buen estado.

El aluminio es muy ligero, por lo que es una excelente opción para todo tipo de persianas, incluso las que son de mayor tamaño. Se suben y se bajan con facilidad y esto es muy importante ya que las persianas excesivamente pesadas acaban dañándose rápidamente y hay que cambiar las lamas cada cierto tiempo.

El aspecto de las persianas de aluminio también es una gran ventaja ya que pueden ser de diferentes tonos y combinar con el aluminio de las ventanas. Se verán bonitas siempre y quedarán perfectamente integradas en la vivienda. Incluso encontramos persianas que imitan los colores de la madera para las viviendas que tienen una apariencia más rústica.

Además de lo dicho, estas persianas son muy seguras, de hecho, se utilizan como persianas de seguridad en comercios. También resultan excelentes aislantes, sobre todo las que tienen en su interior una capa de espuma.

No obstante, este tipo de persianas también tienen elementos en contra y el más significativo es el precio, ya que son algo más caras que las de pvc, por ejemplo. Esto hace que algunas personas se lo piensen ya que cuando se van a instalar en toda la casa, es una cantidad que se nota.

Hay que poner en una balanza la durabilidad y la estética de estas persianas y ver si compensa la diferencia de precio respecto a otros materiales para tomar una decisión y comprar las que mejor se adapten a nuestras necesidades. Hay que tener en cuenta que una persiana es un elemento que va a estar muchos años instalado y que, por tanto, nos interesa que se mantenga bonita y atractiva durante mucho tiempo.

Estores opacos para dormitorios

Los estores opacos son una oferta más para el dormitorio y tienen muchas ventajas para determinados casos. Son perfectos, por ejemplo, cuando no hay persianas ya que permiten eliminar mucha de la claridad del exterior. Si bien lo normal es que siempre se cuele un poco de luz por la distancia que existe entre el estor y la ventana. Si se desea la oscuridad total en el dormitorio, habría que colocar los estores totalmente pegados a la ventana, algo que no es posible con todos los sistemas.

Otra de las ventajas de los estores opacos en el dormitorio es que dan una gran intimidad. Si quieres cambiarte de ropa en la habitación, solo con bajar el estor estarás perfectamente a salvo de cualquier mirada indiscreta, al contrario de lo que pasa con otros estores y cortinas que al encender la luz permiten ver el interior de la vivienda, por lo que es necesario no solo correr las cortinas, sino también bajar las persianas.

Son perfectos para quienes quieren dormir siestas durante el día en la cama, porque les permiten eliminar gran parte de la luz exterior y les dan una sensación de intimidad muy agradable para dormir. Dado que una siesta debe de ser un sueño corto, el hecho de que deje pasar algo de luz puede ser positivo para evitar dormir demasiado tiempo.

Los estores opacos son también una buena idea para lugares de trabajo en los que hay reuniones y se quiere contar con la máxima intimidad. Al bajarlos, nadie verá lo que sucede en el interior del despacho y se podrá garantizar una total confidencialidad con el cliente. Al poder subir y bajar el estor según sea necesario, el despacho podrá estar abierto al resto de la empresa y llevarse un control sobre el trabajo que se realiza, o aislarse de una forma muy efectiva.

Estos son solo algunos de los usos que puede tener un estor opaco, pero también puedes elegir este tipo de cortina por una cuestión meramente estética. Si te gusta la apariencia de este tipo de estores, puedes colocarlos en la habitación y disfrutar de muchas de las ventajas antes mencionadas.

Los estores opacos no tienen por qué ser lisos, pueden tener dibujos y diferentes tonos, por lo que no va ser complicado combinarlos con el resto de elementos de la habitación y que todo quede perfectamente coordinado.

Paneles japoneses, la opción elegante para grandes ventanales

Los ventanales grandes resultan muy atractivos en cualquier vivienda, sobre todo cuando suponen una unión con el jardín o la terraza. Por un lado, dan mucha luz y por otro, al abrirse, permiten comunicar ambos ambientes creando espacios de gran tamaño perfectos para fiestas o grandes reuniones de gente.

Pero ¿cómo decorar estos ventanales para que sean elegantes y a la vez resulten prácticos? La respuesta está en los paneles japoneses. Una de las tendencias más actuales en decoración y que ofrecen grandes posibilidades para un salón o para un dormitorio con un ventanal de este tipo. Pero ¿en qué consisten estos paneles y en qué se diferencian de los estores?

Los paneles japoneses son tiras de tela que pueden ser de diferentes anchos y que se sujetan con un sistema de rieles que permiten jugar con cada una de estas telas para que se muevan de manera independiente.

De esta forma, podemos cubrir por completo el ventanal, mover uno de los paneles para dejar una puerta de entrada y salida libre o incluso mover todos los paneles para un lateral, agrupándolos para que entre la luz. Todo esto sería impensable con estores que solo pueden subirse o bajarse, pero no moverse hacia los laterales.

Gracias a que se trata de franjas independientes, se pueden jugar con distintos tonos, combinando dos o incluso tres tonos diferentes dependiendo del tamaño del ventanal. Se consigue así jugar con el ambiente de una manera muy versátil. Por ejemplo, con tonalidades más oscuras en los laterales, algo más claras desde el lateral hacia el centro y en la parte central una tela casi transparente que deje pasar mayor cantidad de luz. Se concentraría así la luz en un área concreta.

Pero también se podrían realizar otras combinaciones en función de dónde nos interesa que la luz incida más, consiguiendo que así vaya a juego con la decoración o los distintos ambientes que puedan establecerse en el salón.

Incluso es posible optar no ya por distintos tonos, sino por colores diferentes para un efecto distinto mucho más trabajado y que tendría que estar acorde con el resto de la decoración. Se enriquece de esta manera el conjunto de una manera que no se podría conseguir con los estores, a no ser que fueran muy estrechos.

Los paneles japoneses son muy elegantes y modernos y están considerados un elemento muy sofisticado dentro de la decoración de interiores.

4 Tips para comprar estores online y no equivocarte

La venta estores online es cada día más habitual y muchas personas confían en tiendas online para hacer este tipo de compras. Pero otros siguen teniendo miedo a no acertar cuando hacen este tipo de compras a distancia. Para evitar los errores, te ofrecemos una serie de tips que te ayudarán a acertar siempre.

1)  Mide bien el espacio que tiene que ocupar el estor. No se trata del ancho de la ventana, sino de lo que quieres que ocupe el estor. Generalmente, debe de sobresalir unos centímetros a cada lado de la ventana, pero a veces, por la forma de la habitación y para que todo parezca más armonioso, puede ser mucho más grande que la ventana. Por tanto, la medida del estor y la de la ventana no tienen por qué ir a la par.

2) No olvides medir también el largo que quieres que ocupe. No se trata solo de saber el ancho del estor, también es importante el largo, especialmente si quieres que cubra por completo una ventana de gran tamaño. Para las ventanas con medidas fuera de lo corriente pueden ser necesarios estores a medida por no haber en el mercado las medidas buscadas. Si por el contrario la ventana es muy pequeña, con un estor más grande al largo no suele haber problema siempre que este sea enrollable, ya que con no extenderlo de todo estaría arreglado el problema.

3) Si es un estor a medida que no puedes cambiar, mejor pide una muestra de la tela: En los productos que se hacen a medida no se aceptan devoluciones. Uno de los principales problemas es que el color de la tela puede no ser exacto ya que la pantalla del ordenador puede hacer que no la veamos tal y como es realmente. Por eso, pedir una muestra es la mejor manera de asegurarse de que nos quedará bien con el resto de la habitación y que es justamente lo que queremos.

4) Si es un estor en serie, asegúrate de que se hacen cambios: Tal vez cuando llegue a casa el color no sea el esperado o no encaje tan bien como pensabas porque el mecanismo es distinto a cómo te habías imaginado según viste en la foto. Por eso, mejor que puedas hacer cambios o incluso devolverlo y que se te reintegre el dinero.

¿Cuáles son las mejores venecianas para tu cocina?

Las persianas venecianas son perfectas para una habitación como la cocina. Tienen grandes ventajas respecto a las cortinas de tela ya que no vas a tener que lavarlas cada poco tiempo para que se vean bonitas, sino que bastará con limpiarlas con un paño húmedo con la misma frecuencia con la que limpias los azulejos o las puertas de tu cocina.

Respecto a los estores, las venecianas tienen la ventaja de que las lamas se pueden poner en varias posiciones, para que entre más o menos luz del sol, pero sin dejar de mantener la intimidad de la habitación, algo que suele ser de agradecer cuando la cocina da a un patio de luces.

Existen persianas de materiales muy diversos, pero seguramente para la cocina las más acertadas sean las venecianas de aluminio. Este material resiste muy bien la luz del sol, sin amarillear ni estropearse y aguanta la humedad propia de la condensación que a veces puede existir en una cocina.

El defecto del aluminio es que no es demasiado flexible, como ocurre por ejemplo con el PVC, por lo que no se pueden doblar las lamas para ver lo que hay fuera. En la cocina esto no debería de ser un problema, pero si vives en una casa y quieres ver quién llama a la puerta desde la ventana de la cocina sin tener que abrir la persiana, entonces deberías de decidirte por el PVC.

Hoy puedes encontrar persianas tanto en PVC como en aluminio en colores diferentes, lo que te ayudará a conseguir los mejores efectos de decoración. Pero si eres una persona mañosa puedes atreverte a decorarlas tú mismo. En Internet puedes ver muchos ejemplos de personas que lo han hecho con más o con menos éxito e inspirarte en sus logros.

Además de estos materiales, también existen venecianas en madera o en bambú, pero no son las ideales para la cocina a no ser que se traten para que la humedad y el sol no acaben haciendo que se deterioren y se pongan muy feas en un plazo de tiempo relativamente corto. Sin embargo, estos materiales son ideales para salones de viviendas rústicas, donde se verán muy propias.

Cada material es perfecto para una habitación de la casa o para un estilo de vivienda, pero las persianas venecianas pueden encajar en todos y cada uno de ellos sin problemas.

Estores verticales para terrazas

Los estores verticales son ideales para terrazas o para habitaciones acristaladas hasta el suelo. Este tipo de estores no solo le dan a la habitación la intimidad necesaria para cualquier habitación, sino que también le ofrecen la posibilidad de regular la entrada de luz según lo que se desee en cada momento.

Mientras que los estores convencionales son perfectos para ventanas de tamaño normal, los verticales encajan mucho mejor en el concepto de ventanales y terrazas. Pueden estar realizados en tela, en plástico o en lamas de plástico recubiertas por tela. En cualquiera de los casos quedan perfectos y pueden combinar con cualquier tipo de decoración.

Además, se pueden recoger a los lados, dejando las cristaleras despejadas y permitiendo que la terraza tenga la mejor vista, ya sea diurna o nocturna. Y como se pueden poner de diferentes anchos, incluso personalizados, siempre quedarán bien y respetarán los espacios como las puertas, que es imprescindible que se puedan abrir por completo sin que nada dificulte el paso. Los estores del tamaño de la  puerta permiten que, al recogerse, esta pueda abrirse sin problemas ya sea corredera ya sea abatible, y se pueda entrar y salir sin dificultad.

Los estores para terrazas pueden tener todo tipo de acabados. Los que están realizados en tela o recubiertos de tela son los más elegantes. Estos permiten combinar el estor con otros textiles de la terraza o del salón contiguo, consiguiendo así que se vea un espacio decorado y unificado con el resto de la casa. Esto es especialmente importante si salón y terraza pueden unirse al abrir cristaleras.

Uno tipo especial de estores verticales son los paneles japoneses. En lugar de tiras más o menos estrechas de tela, los paneles japoneses están formados por piezas de tela anchas que pueden moverse y combinarse entre sí creando todo tipo de juegos: desde cambiar la decoración al combinar los colores de una manera distinta hasta abrir toda una cristalera agrupando todos los paneles en un solo rincón.

Los paneles japoneses son muy elegantes y tienen un sistema de rieles que les permiten moverse con facilidad, realizándose así los juegos antes mencionados. Muchas viviendas optan por esta manera de decorar porque les permite conseguir efectos muy variados, como una zona de la terraza abierta y otra cerrada, por ejemplo, en función de lo que se esté haciendo en cada una de las áreas.

Un salón original con vistas a la piscina

Cuando se construye una casa de planta baja que da a un jardín es frecuente que la parte de la vivienda que da a dicho jardín esté acristalada de modo que se pueda salir directamente hacia el mismo, sea desde el salón o sea desde una habitación. Si en dicho jardín hay además una piscina, lo cierto es que todavía queda mejor este tipo de construcción.

El acristalamiento desde el suelo hasta el techo permite abrir puertas para salir directamente al jardín pero, en el caso del salón, da para más alternativas. Un buen ejemplo son las puerta/ventanas plegables que se recogen hacia un lado para abrir totalmente el salón al exterior y convertir la terraza y el salón en un espacio único.

Esto es muy interesante de cara al verano, cuando se hacen comidas con los amigos y se puede aprovechar así para usar la mesa de comedor pero, a la vez, sentirse como si se estuviera comiendo en la terraza o disponiendo de la mejor ventilación y respirando aire puro aunque se esté en el interior de la vivienda. También es ideal cuando no hace frío pero llueve un poco, porque se respirará aire fresco pero se estará protegido.

Uno de los problemas de este tipo de ventanas es cómo se cubren. Las cortinas tradicionales pueden resultar muy pesadas como decoración ya que ocupan demasiado espacio. Pero los estores tampoco acaban de convencer porque hay que poner varios y levantarlos y bajarlos según haga falta, pudiendo quedar un poco irregulares y antiestéticos.

Sin embargo, las cortinas panel japones encajan perfectamente con este concepto de ventanas. Se trata de paneles que pueden ser de diferentes anchos e incluso de diferentes tonos y que están sujetos a un sistema de railes que permite moverlos de maneras muy diferentes, separándolos todos para dejar las ventanas totalmente al descubierto o jugando para crear zonas de luz y otras con mayor intimidad y a salvo de las miradas indiscretas.

Al jugar con los colores, los paneles japoneses permiten una decoración mucho más agradable, aunque también pueden colocarse todos en un mismo tono si se ha optado por un salón monocromático. Los bordados pueden hacer que estos paneles sean todavía más especiales y que destaquen aunque no tengan colores. Además, una vez instalados son fáciles de manejar y se quitan y se colocan con facilidad tras haberles cogido bien el truco.

Luz e intimidad no están reñidos

A todos nos gusta tener luz en las habitaciones, pero cuando se vive en una ciudad o en un edificio grande con patios de luces, a veces esta luz está reñida con la intimidad. Tener las cortinas abiertas permite el paso del sol, pero también hace que todo el mundo pueda ver el interior del hogar, algo que no es agradable para nadie.

Por eso, sino quieres sentirte como en un escaparate todo el día, tendrás que buscar una solución que te permita tener luz y a la vez salvaguarde la intimidad necesaria en el hogar. Estas son algunas ideas para conseguirlo:

-Combinar visillos y cortinas gruesas. Se hace usando dos barras, una más baja en la que está el visillo y otra más alta con la cortina gruesa. Durante el día, la cortina se recoge a los lados y se deja el visillo, el cual permite que entre mucha luz. Cuando por la noche se enciende la luz artificial se pueden cerrar las cortinas para dar un mayor resguardo.

– El estor screen. Es un tipo de estor que da muy buen resultado. La tela cuenta con cientos de agujeros muy pequeños por los que se cuela la luz, pero su apariencia es opaca. Deja que la habitación se ilumine, pero no deja ver el interior de la vivienda ni tampoco deja ver el exterior.

-Los estores día y noche. Son perfectos para dormitorios porque se pueden regular para permitir que pase más o menos luz. Se trata de un estor doble que tiene franjas opacas y otras más transparentes. Según se coloque se puede hacer que el estor quede totalmente opaco, totalmente transparente o combinando una y otra opción. Se regula así el paso de la luz que se quiera durante todo el día.

– Las persianas venecianas. Un clásico muy efectivo, ya que regulan muy bien el paso de la luz, ofrecen intimidad y además son bastante económicas. Se adaptan a todas las habitaciones de la casa porque pueden realizarse en diferentes materiales. Las de PVC son perfectas para la cocina y el cuarto de baño, y las de aluminio para el resto de la casa. Pero también las hay en madera e incluso modelos realizados en tela, a medio camino entre la persiana clásica y un estor plegable.

Opciones no faltan para conseguir tener una casa muy luminosa a la vez que discreta.