Principales bodegas de albariño para hacer enoturismo

Con una vasta superficie de su territorio destinada al cultivo de la vid, España es uno de sus destinos más populares para los entusiastas del enoturismo. Debido a la fama de la uva blanca por excelencia, el albariño, las bodegas vinculadas a esta cepa pontevedresa reciben cada vez más afluencia turística.

 

Quienes deciden hacer una visita bodega albariño, encontrarán razones de peso para comenzar por Lagar de Costa, una bodega familiar situada en las Rías Baixas. Nueva de cada diez botellas que llevan su sello se elaboran con uvas provenientes de las vides de esta bodega, que invita a disfrutar de sus albariños a través de catas y tours guiados.

 

Otra experiencia memorable depara a los visitantes de Pazo Baión, una de las bodegas emblema de Galicia, que se asienta sobre una finca cuyos propietarios originarios ya cultivaban la vid hacia el año 1730, nada menos. Sus edificaciones datan del siglo XV, y disponen de herramientas y objetos de interés histórico-cultural que no decepcionarán al turista.

 

De menor tradición pero con idéntico valor vinícola, la bodega Martín Códax dispone de numerosas experiencias de enoturismo, idóneas para recorrer las parcelas, degustar su catálogo de albariños y aprender todo acerca de la elaboración de este caldo milenario.

 

Otra de las bodegas más importantes de Galicia, fuertemente ligada a la elaboración de vinos de uva albariño, es Granbazán. Se ubica en el Valle del Salnés, y como las anteriores, posee un rico patrimonio en forma de chateaux, viñedos y recintos destinados a la cata. Todos sus vinos ostentan la D.O. Rías Baixas y poseen una marcada personalidad.

 

En último término, las bodegas La Val comprenden una treintena de hectáreas en la desembocadura del río Miño. Su carta de vinos cuenta con la D.O. Rías Baixas, y pueden degustarse como parte de las experiencias de enoturismo ofrecidas por la empresa fundada por José Limeres Guille.