Productos que saben mejor según su origen

Hay lugares de España que son famosos por sus productos naturales. Todo el mundo habla de la famosa huerta valenciana, con sus sabrosas hortalizas que forman parte de la gastronomía de la zona o con sus naranjos, famosos en todo el mundo. O el jamón de Huelva, famoso por que los cerdos pueden recibir una alimentación adecuada para que la carne sea la más exquisita. Otro buen ejemplo de lo que contamos es la leche de galicia.

El clima de cada lugar determina que cultivos son mejores en cada zona. Y en los lugares en los que llueve en abundancia y la tierra es fértil la hierba crece durante todo el año. Y esto es exactamente lo que necesitan las vacas para poder alimentarse de forma natural. Cuando estos animales se alimentan al aire libre y de la forma tradicional, su leche tiene un sabor inconfundible que no se puede comparar al de los animales que pasan gran parte de su vida encerrados y se alimentan principalmente de piensos artificiales.

Por eso, esta leche es conocida en toda España y destaca por su gusto y también por sus cualidades. Y es que la alimentación natural y el cuidado tradicional de los animales garantiza que el producto va a contar con todas las vitaminas y minerales propios de la leche, sin perder cualidades. Los procesos de envasado en ningún caso son un problema ni deben de alterar el sabor de la bebida, por lo que cuando llega a casa debe tener el mismo gusto que recién ordeñada.

Hoy, sabemos que no se trata de producir más, sino de que los productos tengan una mejor calidad. Esta es la clave para poder competir en el mercado ya que el consumidor está concienciado y sabe que es preferible pagar lo justo por un producto y poder así tener algo bueno, sabroso y que realmente responda a sus exigencias.

Este es uno de los motivos por los que el etiquetado de cada producto es cada vez más exigente y en la mayoría ya se obliga a indicar cuál es el origen de este. Así, cuando tomamos leche, sabemos exactamente donde se produce, incluso la granja de la que procede. Y lo mismo sucede cuando compramos otro tipo de artículos en los que es muy importante saber de dónde vienen y no solo quién los envasa finalmente.