Cómo alquilar inmuebles industriales

Si tienes una empresa o industria, te interesará saber cómo conseguir el alquiler inmuebles industriales. Al alquilar un local industrial, se debe realizar ante todo un contrato cuyas condiciones están estipuladas por la Ley de Arrendamientos. Por lo general, primero se llega a un acuerdo verbal y segundo se deja por escrito.

 

Cada contrato que formalizamos para alquilar un inmueble con un uso distinto al de una vivienda, tiene una libertad de convenios regidos por pautas establecidas por los involucrados, que son específicos según las características de cada caso.

Aun así, cada cláusula debe ser legal, es decir, estar contemplada en el código civil, que siempre prevalece en los distintos tipos de convenios.

 

Características generales para el contrato de alquiler de un inmueble industrial

 

Debe identificarse claramente, tanto el arrendatario como el dueño, el espacio alquilado, y su dirección exacta, el tiempo que va a ser ocupado, el monto a pagar, el monto de la fianza, y cada agregado que determinen las partes en forma de cláusulas.

Este tipo de documento es de formato libre, pero se pueden conseguir modelos normalizados en los bancos de arrendamientos legales, que están destinados para dicho fin.

Cuando no se determine por escrito la duración del contrato, tiene una vigencia legal por período de un año, al cabo del cual puede ser renovado.

Por lo general, el importe de la fianza es de dos meses, que puede ser negociable, según las leyes que regulen cada caso particular.

La forma de pago esta libre a la disposición de las partes implicadas, y solo puede exigirse un mes por adelantado. El pago debe ser efectivo durante los primeros siete días de cada mes, bajo acuse de recibo.

Los galpones, plantas, naves o cualquier espacio arrendado para uso industrial, debe regirse por pautas determinadas en el Registro de Arrendamiento, conforme a las características particulares de cada caso.

Estas características tienen que ver con las funciones y acciones que se van a desarrollar en el espacio alquilado, sus políticas de seguridad e higiene urbanístico.

Siempre que se cumpla la ley, cada espacio puede ser subarrendado, siempre que se mantenga en comunicación con el arrendador principal, el cual puede exigir el aumento de su pago desde un 10 hasta un 20%.

En el caso de que el inmueble deba ser vendido, el arrendado tiene el derecho a la compra, incluso, puede impugnar el proceso si se inició sin ser consultado.